Este tipo de estafa consiste en recibir una llamada telefónica en la cual exigen cantidades que oscilan entre 1.000 a 10.000 euros por la liberación de un familiar.

En estas estafas, siempre siguen el mismo modus operandi: los secuestradores virtuales eligen un número de teléfono al azar y llaman desde teléfonos ocultos o con el prefijo 0056, que pertenece a Chile, para intentar hacerles creer que tienen retenido a un familiar suyo y que deben enviarles dinero si lo quiere volver a ver. Intentan desde el primer momento intimidar a la víctima para que ante su situación de nerviosismo les facilite más información sobre el supuesto familiar secuestrado y haciendo incluso más creíble la situación.

Estas llamadas, son muy agresivas y directas, y los extorsionadores llegan a poner al teléfono a terceras personas que imitan gritos y lloros de las supuestas víctimas y exigen dinero rápido a través de empresas de envío de remesas.

Las redes sociales juegan un papel importante en este tipo de estafas, ya que algunos timadores investigan a las familias en las redes sociales desde fuera del país, por lo que debemos de ser muy cautelosos sobre que contenidos publicamos en nuestras redes y ser muy estrictos con nuestra privacidad.

Por todo esto, desde el Área de Participación Ciudadana de la Policía Nacional se está poniendo en marcha campañas para concienciar a la ciudadanía de que no están ante un secuestro real, sino sobre ante una extorsión telefónica. Por lo que Don Francisco Becerra nos ha dado unas series de pautas a seguir para evitar ser víctima de los llamados secuestros virtuales:

- No descuelgue llamadas que no espera con prefijo 0056 o +56 o con número oculto.

- Desconfíe si le dicen que han secuestrado a un familiar, incluso si se pone otra persona o se escuchan voces de fondo: no son su familiar.

- Mantenga la calma ante la presión ejercida por el falso secuestrador, que usará violencia verbal de cualquier tipo.

- Compruebe la información que le están aportando los falsos secuestradores.

- No realice ningún pago, le exigirán un pago rápido para no dar tiempo de localizar al familiar, no envíe ningún dinero.

- No facilite datos personales y tampoco los publique en redes sociales.

- Avise a la Policía Nacional (091) e intente localizar al supuesto secuestrado por otra línea, así como grabar la llamada maliciosa.

Nuestros asistentes, que han sido un total de 20 personas, han quedado encantados con esta charla y han comprobado lo fácil que es estafar a alguien aprovechándose de momentos de vulnerabilidad de las personas.

Desde Mensajeros de la Paz Extremadura y desde el Hogar de Mayores de la Zona Sur de Mérida, queremos agradecer una vez más la disposición de Don Francisco Becerra Acedo por hacer posible que este tipo de charlas lleguen a nuestros socios y socias de una forma directa.