Un verano de ensueño. Así podría calificarse los meses de estío que han vivido los residentes en el Centro Residencial y Familiar de Nuñomoral para personas con discapacidad, gestionado por Mensajeros de la Paz Extremadura.

Como si de influencers se tratara o de mismísimos instagramers, los residentes de Nuñomoral han disfrutado con deportes de rabiosa actualidad como son el yoga, el aquagym y el surf.

Dos días por semana, en la piscina municipal de Casares de Hurdes, los deportistas se echaban al agua para practicar sin riesgos gimnasia de mantenimiento. Además, bajo la atenta mirada de Noemí, maestra yogui, la energía positiva se ha esparcido por sus instalaciones gracias al yoga. Aquí y ahora, disfrutar del presente y ser conscientes de su propio cuerpo son algunos de los aspectos básicos de esta práctica oriental milenaria que cada día gana más adeptos en occidente.

Pero como si practicar aquagym o yoga no fuera suficiente para disfrutar de las tardes estivales, el 21 de agosto, catorce residentes, acompañados de cuatro de sus monitores viajaron hasta El Anillo para practicar en el gran pantano de Gabriel y Galán vela y paddel surf. Para enseñar el arte de estos deportes, con nuestros monitores y usuarios estuvieron David y José Miguel monitores de Phantos Deporte Inclusivo, empresa que facilitó la asistencia de Mensajeros de la Paz Extremadura a estas instalaciones. Paseos en barco y deporte en bicicleta estática hicieron de la jornada un día completo.

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