Mensajeros de la Paz Extremadura Atención a las Familias

  • Diario Digital | sábado, 02 de noviembre de 2024
  • Actualizado 06:48

El Programa de Atención a Familias de Moraleja reivindica la diversidad familiar

Con motivo del Día Internacional de las Familias, el día 15 de mayo, el Programa de Atención a Familias de Moraleja, recurso financiado por la Dirección General de Servicios Sociales, Infancia y Familia de la Junta de Extremadura y gestionado por Mensajeros de la Paz Extremadura, lo ha celebrado con la participación de familias diversas, en el Centro de Día de Mensajeros de la Paz
El Programa de Atención a Familias de Moraleja reivindica la diversidad familiar

Hay mucha variedad de familias: tradicionales, divorciadas o separadas, reconstituidas, numerosas, monoparentales, homoparentales, con un solo hijo o hija, étnicas, multigeneracionales...  Visibilizar y normalizar junto a los hijos e hijas esta realidad, les hará ser personas más empáticas y respetuosas. La diversidad de modelos familiares nos enriquece y nos hace mejorar como sociedad.

Esta fecha conmemorativa, nos da la oportunidad de reflexionar sobre la importancia del hogar, fortalecer los lazos entre sus miembros y celebrar la diversidad de modelos familiares que existen hoy día en nuestra sociedad, todos ellos igual de válidos, siempre que se guíen desde el amor y el respeto.

El objetivo que se ha pretendido con esta actividad ha sido fomentar la tolerancia basada en el respeto a la diversidad, con jóvenes y mayores, para entender que no hay una única forma de tener una familia. A través del cuento, como herramienta, los niños y niñas han podido ver, que no todas las familias son iguales, que cada una es diferente, única y especial y que todas son válidas y normales.

También, este 15 de mayo, ha sido una jornada para disfrutarla en conjunto, a través del ocio y el entretenimiento, ya que en el día a día, no siempre tenemos todo el tiempo que nos gustaría para compartir con los nuestros... Con el “Juego de la oca de las familias”, han disfrutado tanto jóvenes como mayores. Compartir momentos de recreo favorece la unión familiar, facilita la comunicación y contribuye a que se generen vínculos más fuertes para unas relaciones familiares duraderas y basadas en la confianza y el respeto, además de ser una importante fuente de aprendizaje.